A principios de año, un pájaro que se creía extinto reapareció en la isla Pájaros Uno, ubicada en la localidad de La Higuera, en Coquimbo. Se trata de los yuncos, una ave petrel buceadora que llevaba décadas desaparecida como resultado de la invasión de ratas depredadoras en sus hábitats. 

Gracias a la colaboración de la organización Island Conservation los yuncos fueron avistados recorriendo la isla mediante el uso de cámaras trampa y fondos de audio. Además, los expertos lograron identificar madrigueras activas, lo que indica que pronto podrían nacer polluelos. Esta gran noticia brinda esperanza de que vuelvan a asentarse en la isla. 

Este retorno fue posible gracias a un proyecto de Island Conservation iniciado en 2020 junto a la Fundación Nacional de Pesca y Vida Silvestre y la Fundación Packard. En casi dos años, se desterró a los depredadores y en 2023 se utilizaron grabaciones de canto de yuncos como parte de una técnica conocida como atracción social. 

De este modo, replicando el éxito del método que ya había sido utilizado con anterioridad en la isla Chañaral, se logró que las aves identificaran al lugar como un hábitat apto para anidar. El avistaje es un acontecimiento que demuestra cómo la restauración ecológica puede lograr resultados a corto plazo. 

Un pájaro extinto por la invasión de especies en su hábitat

Las islas son especialmente vulnerables al ingreso de especies exóticas invasoras (EEI), ya que muchas aves nativas carecen de defensas contra los depredadores introducidos. De hecho, en el territorio chileno, las EEI representan la segunda causa más común de extinción, tan solo detrás de  la pérdida de hábitats. 

En lugares como Chañaral, por ejemplo, los conejos y zorros habían contribuido a la desaparición de yuncos al destruir sus madrigueras y la vegetación local. Sin embargo, una vez que los invasores pudieron ser controlados, la isla volvió a ser habitable y las aves regresaron, tal como ahora sucede en la isla Pájaros Uno.

Organizaciones ambientalistas como Greenpeace Chile, aprovechan este caso para alertar sobre las más de mil especies exóticas invasoras que existen en Chile. Los expertos consideran que al menos 27 de ellas representan una amenaza significativa para la biodiversidad, perjudicando a animales como el visón e insectos como la avispa chaqueta amarilla, entre otros. 

Las consecuencias positivas del regreso de los yuncos

Además del retorno de los yuncos, la restauración ecológica realizada en la isla Pájaros Uno tiene muchos otros beneficios para el ecosistema. Esto se debe a que las aves marinas aportan nutrientes desde el mar hacia la tierra a través de su guano, que enriquece los suelos de las hábitats terrestres y costeros, generando impactos positivos sobre la vida vegetal y marina.

Por este motivo, el proyecto llevado a cabo en Pájaros Uno se ha consolidado como un modelo a seguir en materia de restauración ecológica. Los científicos esperan que su éxito pueda replicarse en otras islas dentro de la Corriente de Humboldt y otras regiones, fortaleciendo la conservación de los ecosistemas insulares del país.

Ventajas económicas de la restauración ecológica

El retorno de los yuncos no solo representa una restauración ambiental, sino también el rescate del patrimonio natural de la isla. Estas aves forman parte de los corredores biológicos de la Corriente de Humboldt y constituyen un símbolo de resiliencia para las comunidades y ecosistemas costeros. 

Su ausencia representaba no solo una pérdida ecológica, sino también un empobrecimiento cultural y turístico. Cuando los ecosistemas costeros se recuperan, se reabren oportunidades para el desarrollo del ecoturismo sostenible, ya que las aves atraen visitantes interesados en la observación de la fauna loca. 

¿Cómo proteger a los yuncos en el futuro?

El regreso de los yuncos a la isla Pájaros es un recordatorio de que su futuro depende de lo que los seres humanos hagan de ahora en más. Es imprescindible mantener la isla y sus lugares de anidación libres de depredadores, para que puedan criar a sus polluelos sin amenazas. También será necesario seguir protegiendo su entorno marino, ya que dependen de la Corriente de Humboldt para alimentarse. Sin esas aguas ricas en nutrientes, su presencia en las islas podría ser efímera. 

Por último, es fundamental combatir el cambio climático, ya que el aumento de la temperatura de los océanos puede alterar la disponibilidad de peces, afectando directamente la supervivencia de estas aves. Su regreso es una muestra de que la restauración ecológica funciona, pero para que siga siendo así hay que darle una oportunidad a la naturaleza.