Temporal en Bahía Blanca: los estragos y destrozos que generó

Temporal en Bahía Blanca: los estragos y destrozos que generó

El temporal ocurrido en la ciudad bonaerense de Bahía Blanca el pasado 7 de marzo ocasionó severas inundaciones; significativos daños materiales; el fallecimiento de, por lo menos, 16 personas y aproximadamente mil evacuados. 

El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) había emitido el jueves 6 de marzo una alerta de color naranja debido a intensas tormentas en la región central y noroeste del país. Por la mañana temprano, se incrementó la alerta de naranja a roja.

El alcalde de la ciudad afectada, Federico Susbielles (Unión por la Patria), indicó que la reconstrucción no tendrá un costo inferior a $400 mil millones.

Cabe destacar que la amplitud de esta catástrofe, por la cual el en la Argentina se decretó tres días de duelo a nivel nacional, llevó a especialistas a analizar sus posibles causas.

¿A qué se refiere cada uno de estos factores?

En un día, se registró la cantidad de lluvia correspondiente a lo que podría caer en un periodo de 6 meses. La precipitación comenzó alrededor de las 4 de la mañana del viernes 7, y se registraron aproximadamente 290 milímetros de agua a lo largo del día, -una cifra histórica para marzo-, indicó el Servicio Meteorológico Nacional (SMN). 

Anualmente, en la región de Bahía suelen precipitarse aproximadamente 650 milímetros. Por lo tanto, se precipitó en un único día lo que normalmente llueve en un lapso de 6 meses.

Lo que precipitó en Bahía se puede equiparar con las inundaciones de La Plata, en abril de 2013, cuando se registraron casi 400 milímetros en 4 horas, o lo acontecido en Santa Fe, en marzo de 2003, cuando se recogieron más de 1400 milímetros.

“Nunca se había registrado una precipitación tan extrema”, afirmó José Luis Stella, meteorólogo del SMN, en conversación con los medios de comunicación en la Argentina. El fenómeno fue caracterizado por la continuidad de una masa de aire cálido y húmedo.

El especialista explicó que la entrada de un frente frío proveniente del sur se encontró con esta masa de aire cálido e inestable, lo que ocasionó su estancamiento en la región y el surgimiento de tormentas severas.

Por otro lado, dijo que el sector de tormentas más persistente tuvo lugar en el sudoeste de Buenos Aires y en el sudeste de La Pampa. En gran medida de esa región había estado lloviendo considerablemente durante la última semana, por lo que muchos ríos y arroyos ya se encontraban saturados al momento de comenzar el temporal del viernes.

Bahía Blanca experimentó un trágico temporal en diciembre de 2023 que resultó en la muerte de 13 personas y causó significativos daños materiales. En dicho evento, el impacto principal fue el viento intenso, mientras que en esta ocasión la acumulación de agua constituyó el factor clave.

A su vez, en el año 2023, el frente frío se movió con mayor celeridad, lo que provocó ráfagas intensas de viento y posteriormente un temporal en la Capital Federal y el Gran Buenos Aires.

Las características de ubicación de la ciudad de Bahía Blanca

Un estudio de hidrografía urbana de Bahía Blanca, llevado a cabo por la investigadora Paula Zapperi y publicado por el Conicet en 2012, detalla que la ciudad se localiza en la cuenca baja del arroyo Napostá que recorre el interior.

“Esta posición contribuye a que reciba el escurrimiento generado aguas arriba, además de aumentar el peligro de inundación por sus crecidas”, explica el informe, y señala que el principal efecto de las precipitaciones intensas en la ciudad son las inundaciones en zonas de menor pendiente.

“En las áreas de mayor altitud, el escurrimiento de agua erosiona las vías no pavimentadas y el material erosionado es depositado en niveles inferiores”, agrega la investigación.

El desbordamiento del canal Maldonado y el arroyo Napostá

El desbordamiento del canal Maldonado y del arroyo Napostá sumergió a una considerable porción de la ciudad en agua, particularmente la zona baja, la cual se encuentra más afectada debido a que es imposible acceder a ella de manera vial, expuso el Municipio de Bahía Blanca en un comunicado emitido el pasado viernes. Esto también ocurría en 2012, ya que fue citado en el estudio publicado por el Conicet.

El Maldonado constituye un canal de alivio, mientras que el Napostá se presenta como un curso natural que cruza la ciudad y se encuentra mayormente entubado. Todas las infraestructuras hidráulicas se construyen para tormentas comunes; ningún diseño considera el tipo de tormenta ocurrido el pasado viernes. 

Por consiguiente, las obras hidráulicas constituyen una solución parcial del problema, en la medida en que están dimensionadas para una precipitación que no exceda 30 o 50 mm en una hora.

Especialistas remarcaron que fenómeno se caracterizó por ser multicausal; sin embargo, el más significativo fue la precipitación. 

Zapperi, quien posee un doctorado en Geografía, tuvo una conversación con la periodista María O’Donnell en “De Acá en Más” y  manifestó: “Nos encontramos en la Cuenca inferior del Arroyo Napostá, el cual tiene su origen en la Sierra de la Ventana. Este arroyo atraviesa la ciudad y desemboca en la región, superando el área del puerto. A su vez, como consecuencia de una creciente en el año 1944, se utiliza un canal natural que era el canal Maldonado y se construye un canal derivador. En ese instante se estima para una descarga análoga más o menos a esa tormenta (de los años 40)”.

Por otro lado, advirtió: “Posteriormente, en la década de los ‘80, se realiza un diseño de desagües pluviales que fue lo que en gran parte de la ciudad hoy posibilitó drenar todo lo que se había acumulado. El asunto radica en que la lluvia resultó ser de gran relevancia, constituyendo un acontecimiento verdaderamente sin precedentes. Entonces, se presentó un momento en el cual el arroyo se incrementó, así como el canal, y, por supuesto, las zonas más impactadas son las zonas de la llanura de inundación de estos cursos.

“En nuestro arroyo no poseemos un caudal significativo; por lo tanto, se genera una falsa impresión de que no hay agua. Sin embargo, en realidad, ello ya ha sucedido y las crecidas han sido sustanciales.” “Por lo tanto, también se encuentra algo en el inconsciente de la ciudad respecto al tema de la inundación”, añadió.

Este tipo de fenómenos tienden a ser más comunes e intensos debido al cambio climático. Aún no es posible determinar con certeza si el fenómeno experimentado en Argentina guarda una relación directa con el cambio climático. A pesar de esto, el saldo de muertos en dicho fenómenos es alarmante: por lo momento, al menos hay 16 víctimas mortales confirmadas, y más de 130 personas aún desaparecidas.

Como se menciona en el documento, uno de los efectos más visibles del cambio climático es la creciente frecuencia de precipitaciones extremas que provocan inundaciones, crecidas y deslizamientos de tierra.

Según la Organización Meteorológica Mundial (OMM), “las inundaciones constituyen uno de los riesgos naturales más letales y afectan anualmente a diversas regiones del mundo. La creciente presión demográfica, la degradación de los ecosistemas y la variabilidad así como el cambio climático contribuyen a incrementar aún más el riesgo de inundaciones a nivel mundial.

En la evaluación internacional del clima llevada a cabo en 2021 por el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático se señala que el ciclo del agua ha experimentado una intensificación y continuará intensificando conforme el planeta se calienta.