Customize Consent Preferences

We use cookies to help you navigate efficiently and perform certain functions. You will find detailed information about all cookies under each consent category below.

The cookies that are categorized as "Necessary" are stored on your browser as they are essential for enabling the basic functionalities of the site. ... 

Always Active

Necessary cookies are required to enable the basic features of this site, such as providing secure log-in or adjusting your consent preferences. These cookies do not store any personally identifiable data.

No cookies to display.

Functional cookies help perform certain functionalities like sharing the content of the website on social media platforms, collecting feedback, and other third-party features.

No cookies to display.

Analytical cookies are used to understand how visitors interact with the website. These cookies help provide information on metrics such as the number of visitors, bounce rate, traffic source, etc.

No cookies to display.

Performance cookies are used to understand and analyze the key performance indexes of the website which helps in delivering a better user experience for the visitors.

No cookies to display.

Advertisement cookies are used to provide visitors with customized advertisements based on the pages you visited previously and to analyze the effectiveness of the ad campaigns.

No cookies to display.

La pérdida de su entorno natural está llevando al yaguareté a la extinción

Yaguareté acostado sobre un tronco grueso en medio del monte seco, rodeado de ramas y raíces expuestas.

En el contexto del Día Internacional del Yaguareté, Greenpeace destacó la grave situación de esta especie, que aunque fue declarada Monumento Natural Nacional (Ley Nº 25.463 / 2001), enfrenta serias amenazas debido a la caza ilegal y a la deforestación descontrolada.

En Argentina, se estima que hay entre 250 y 300 yaguaretés, siendo la población más vulnerable la del Gran Chaco, que cuenta con menos de 20 individuos.

La Sociedad Argentina para el Estudio de los Mamíferos -SAREM- clasifica al yaguareté como «En Peligro Crítico (CR)», ya que se estima que su población ha disminuido un 80% en los últimos 20 años y las amenazas que enfrenta se han mantenido o incrementado.

Noemí Cruz, coordinadora de la campaña de bosques de Greenpeace en Argentina, afirmó: “La supervivencia del yaguareté está ligada a la conservación de su hábitat. Para salvar esta especie emblemática y todo lo que representa para la biodiversidad, es esencial proteger los bosques y detener la deforestación. Estamos en un punto crítico y cada acción para evitar su extinción es crucial, pero todos sabemos que sin bosques, no habrá esperanza. Además, otras especies que dependen de él también están en peligro, como el tatú carreta y el quimilero.”

La deforestación es un reto urgente desde hace 20 años:

Para que cada animal sobreviva, se necesitan alrededor de 40 mil hectáreas de bosque continuo y en buen estado.

A pesar de los esfuerzos realizados, la destrucción de su hábitat en el país ha resultado en que en los últimos 200 años su población se haya reducido a un alarmante 5% de su área original. A nivel mundial, los científicos sugieren que los jaguares habitan menos del 50% de su territorio ancestral.

Recientemente, la Corte Suprema de Justicia de la Nación se pronunció sobre el amparo presentado por Greenpeace para proteger a los últimos yaguaretés en el Gran Chaco Argentino, solicitando informes al Estado Nacional y a las provincias de Chaco, Salta, Santiago del Estero y Formosa, que son las que más han desmontado. Cruz comentó: “Es la primera vez en la historia que podremos defenderlos.”