Esquel, una localidad situada en la provincia de Chubut, se prepara para añadir un nuevo atractivo a su ya impresionante oferta natural: la creación de una nueva área natural protegida. En las últimas horas, las autoridades de la ciudad y la provincia anunciaron la implementación de un proyecto que busca combinar la conservación de los recursos naturales con el desarrollo del turismo responsable. Este esfuerzo tiene como objetivo proteger los «Túneles de Hielo», un fenómeno geológico singular que se forma en la ladera del Cerro La Torta, cerca del Parque Nacional Los Alerces.

El proyecto no solo representa un avance en la protección del patrimonio natural de la región, sino que también impulsa el turismo en una zona que, hasta ahora, no había sido explorada en su totalidad. Los túneles, formaciones de hielo que atraen a turistas de todo el mundo, se convertirán en un emblema del turismo de naturaleza y aventura en la Patagonia. Esta declaración de área protegida asegurará la preservación de este fenómeno único para las generaciones futuras.

Qué son los túneles de hielo y cómo se forman

Los túneles de hielo del Cerro La Torta, situados a unos 1.900 metros sobre el nivel del mar, son el resultado de un proceso geológico único conocido como descongelamiento inverso. A diferencia de lo que ocurre en la mayoría de los casos, donde el deshielo comienza desde la superficie, en este caso se produce desde el interior hacia el exterior. Durante los meses de verano, el calor y una cascada cercana socavan la nieve acumulada, creando cavidades que dan lugar a estas formaciones tubulares.

Este fenómeno natural, que se desarrolla a unos 50 kilómetros de Esquel, solo se produce en muy pocos lugares del mundo, lo que convierte a los túneles en un atractivo turístico de relevancia internacional. Los turistas que llegan a la zona se ven deslumbrados por las tonalidades de los colores que se reflejan en las paredes de hielo: celestes y verdes que brillan intensamente bajo los rayos del sol. Además de lo visual, la experiencia también es sensorial, ya que los visitantes pueden escuchar el goteo constante del deshielo y el eco de sus voces dentro de los túneles.

Experiencia inolvidable para los aventureros

La aventura hacia los túneles de hielo comienza con un emocionante recorrido en vehículos todoterreno a través del bosque de lengas que rodea al Parque Nacional Los Alerces. A lo largo del trayecto, los turistas pueden disfrutar de paisajes impresionantes que enmarcan el viaje, haciendo de cada momento una experiencia inolvidable. Una vez en los túneles, el espectáculo de la naturaleza se despliega ante sus ojos: los colores, las formas y los sonidos se combinan para crear una atmósfera casi mágica.

El momento ideal para visitar los túneles es durante los meses de enero y febrero, cuando el deshielo alcanza su punto máximo. Sin embargo, debido a que se trata de un proceso natural, las fechas exactas pueden variar según las condiciones meteorológicas de cada año. Este detalle añade un componente impredecible y emocionante a la experiencia, lo que la convierte en un destino aún más atractivo para los aventureros.

Esquel y su compromiso con el turismo sostenible

La creación de esta nueva área protegida, celebrada por organizaciones ambientalistas, como Greenpeace Argentina, no solo responde a una necesidad de conservar los recursos naturales, sino que también se enmarca en una estrategia más amplia para posicionar a Esquel como un referente del turismo sostenible en la Patagonia. Las autoridades locales han destacado que la combinación entre la conservación y el desarrollo turístico es clave para el futuro de la región, y la creación de los Túneles de Hielo como área natural protegida es un claro ejemplo de este enfoque.

Este proyecto no solo preservará un fenómeno natural único, sino que también abrirá nuevas oportunidades para el desarrollo económico local a través del turismo. Además, permitirá a Esquel y sus alrededores conectarse mejor con otras áreas de interés turístico, como el Parque Nacional Los Alerces y la zona de Alto Río Percy, consolidando una oferta turística que atrae tanto a visitantes nacionales como internacionales.

Área natural protegida, preservación y turismo

La interacción entre la preservación del medio ambiente y el crecimiento turístico es un desafío que Esquel está dispuesta a enfrentar. La declaración de los Túneles de Hielo como área natural protegida es solo el comienzo de un proyecto a largo plazo que busca garantizar que este recurso natural se conserve para las futuras generaciones. Al mismo tiempo, la región se posiciona como un destino turístico de primer nivel, donde los visitantes pueden disfrutar de una experiencia auténtica y sostenible.

El equilibrio entre conservación y turismo no es fácil de lograr, pero con una gestión responsable, Esquel está dando un paso en la dirección correcta. Este proyecto no solo tiene el potencial de proteger los túneles de hielo, sino también de establecer un modelo de turismo sostenible que podría replicarse en otras áreas de la Patagonia y del país. Así, los Túneles de Hielo se convierten no solo en un atractivo turístico, sino también en un símbolo de cómo es posible preservar la naturaleza mientras se promueve el desarrollo económico.