Cambio climático: ¿Cómo afectará a los glaciares andinos en las próximas décadas?

Comparación entre una fotografía histórica y una actual que muestra el retroceso extremo de un glaciar andino, revelando un lago donde antes había hielo.

De acuerdo con un estudio reciente publicado en la revista científica Scientific Reports, el cambio climático está provocando que el deshielo de los glaciares de los Andes se acelere. Esto podría tener consecuencias terribles para toda la región (incluyendo a países como Argentina, Chile, Perú, Bolivia y Ecuador), ya que el agua proveniente del escurrimiento glaciar es vital para su abastecimiento, especialmente en las estaciones secas. 

Sin embargo, un reciente estudio publicado en Scientific Reports advierte que, entre 2030 y 2049, la mayoría de las cuencas glaciares alcanzarán su pico hídrico, para luego iniciar un declive preocupante.

El estudio realizado por científicos de Chile, Francia y Bélgica, analizó 778 cuencas de los Andes y llegó a la conclusión de que entre el año 2030 y el año 2049, la mayoría alcanzará un pico máximo. Pero luego, iniciará un declive que podría dejar sin agua a todas las zonas que dependen de ellos para su suministro. 

Los investigadores analizaron las tres grandes zonas de los glaciares andinos, divididas en los Andes Húmedos, los Andes Secos y los Andes Tropicales. Para hacer sus proyecciones, utilizaron simulaciones por computadora que les permiten predecir cómo cambiará el clima en el futuro y un programa llamado Modelo Glaciar Global Abierto (OGGM, por sus siglas en inglés), que permite estudiar el comportamiento de los glaciares bajo diferentes escenarios de calentamiento global.

¿Cómo afectará el cambio climático a los glaciares andinos?

Lamentablemente, el futuro de los glaciares andinos es alarmante. Los expertos estiman que más del 95% de las cuencas perderán enormes cantidades de masa glaciar antes del 2030, lo que se traducirá en una menor disponibilidad de agua en la región en el futuro inmediato. 

Las zonas más afectadas serán los Andes Tropicales, donde se espera ¡una pérdida de hasta el 43% del escurrimiento glaciar entre 2030 y 2049! Esta región incluye a Perú, Bolivia y Ecuador, países que ya están experimentando los efectos del calentamiento global, con temperaturas extremas y sequías que no hacen más que agravar la situación. 

Mientras tanto, en los Andes Secos (en diversas zonas de Chile y Argentina), se espera una disminución del 37%. Los especialistas destacan que algunas cuencas, como la del río Tupungato, podrían tener aumentos temporales de hasta el 32% como resultado del deshielo acelerado. Sin embargo, advierten que este incremento del caudal de agua sería un espejismo. Finalmente, en los Andes Húmedos habrá una reducción del 32% en el escurrimiento glaciar, pero se espera que, al contar con mayores precipitaciones, se atenúen los efectos. 

¿Qué consecuencias tendrá esta disminución?

La pérdida de agua proveniente de los glaciares no solo afectará el suministro para consumo humano, sino que pondrá en riesgo la capacidad de regar las cosechas y generar energía hidroeléctrica. Asimismo, todo el equilibrio de los ecosistemas andinos podría verse alterado ante la falta de agua. 

Según el científico chileno Alexis Caro, autor principal del estudio, muchas cuencas ya están funcionando al máximo de su potencial, por lo que se espera que en los veranos futuros, la competencia por este recurso aumente de forma considerable. Por otra parte, el deshielo de los glaciares afectará la biodiversidad de las zonas de alta montaña, ya que estas especies están acostumbradas a ambientes fríos que podrían cambiar de forma notable. 

Una Ley de Glaciares que no se cumple

En Argentina, desde el año 2010 existe la Ley de Glaciares, que establece que estas masas de hielo deben ser protegidas a toda costa por su función como reservas de agua dulce. Sin embargo, desde su aprobación, la norma no ha sido respetada por completo y varios sectores políticos y de la industria minera la han pasado por alto para hacer sus negocios. 

Leandro Gómez, representante de la Fundación Ambiente y Recursos Naturales (FARN), explica que la protección de los glaciares no solo es fundamental para asegurar el agua en el presente, sino también a largo plazo. Por eso, desde organizaciones ambientalistas como Greenpeace Argentina, exigen que la ley se aplique sin excepciones. 

La importancia de los estudios científicos

Los expertos que participaron del estudio coinciden en que es necesario que los gobiernos de los países sudamericanos implicados inviertan más dinero en la investigación científica en las zonas de alta montaña. Lucas Ruiz, investigador del Instituto Argentino de Nivología, Glaciología y Ciencias Ambientales (IANIGLA), que forma parte del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet) remarcó que es la primera vez que se analiza cómo los glaciares contribuyen al caudal de los ríos de la región andina. 

Pero hacen falta nuevos estudios que analicen con mayor detalle cada cuenca. Además, los especialistas resaltan que es importante que cada Estado mejore su gestión del agua, a través de políticas basadas en datos reales. De ello dependerá que sus ciudadanos cuenten con este recurso vital en el futuro.