Customize Consent Preferences

We use cookies to help you navigate efficiently and perform certain functions. You will find detailed information about all cookies under each consent category below.

The cookies that are categorized as "Necessary" are stored on your browser as they are essential for enabling the basic functionalities of the site. ... 

Always Active

Necessary cookies are required to enable the basic features of this site, such as providing secure log-in or adjusting your consent preferences. These cookies do not store any personally identifiable data.

No cookies to display.

Functional cookies help perform certain functionalities like sharing the content of the website on social media platforms, collecting feedback, and other third-party features.

No cookies to display.

Analytical cookies are used to understand how visitors interact with the website. These cookies help provide information on metrics such as the number of visitors, bounce rate, traffic source, etc.

No cookies to display.

Performance cookies are used to understand and analyze the key performance indexes of the website which helps in delivering a better user experience for the visitors.

No cookies to display.

Advertisement cookies are used to provide visitors with customized advertisements based on the pages you visited previously and to analyze the effectiveness of the ad campaigns.

No cookies to display.

 La Real Academia Española incorpora 65 palabras sobre la crisis climática

 La Real Academia Española incorpora 65 palabras sobre la crisis climática

La crisis climática está en boca de todos. Y el lenguaje, que vive en constante evolución, es un reflejo de cómo los seres humanos comprenden el mundo que los rodea. Es por eso que el nuevo anuncio de la Real Academia Española (RAE), que prepara la incorporación de 65 nuevos términos relacionados con los eventos climáticos extremos y el cambio climático a su diccionario, es una nueva de muestra de la preocupación de la población mundial por estos temas.  

La noticia de estas nuevas añadiduras fue compartida por el actual director de la RAE, Santiago Muñoz Machado, durante el XVI Seminario Internacional de Lengua y Periodismo llevado a cabo en el Municipio San Millán de la Cogolla, en España. Este paso dado por la RAE deja de manifiesto la importancia de adaptar el léxico a los desafíos ambientales para brindar a la sociedad las herramientas lingüísticas necesarias para comprender y enfrentar la crisis climática. 

¿Por qué el vocabulario sobre crisis climática evoluciona tan rápido?

Por lo general, el vocabulario evoluciona a un ritmo lento. Pero con la que el mundo moderno va transformándose puede impulsar revoluciones en el lenguaje. Por ejemplo, sucede mucho con la tecnología, donde de forma constante van haciendo falta nuevos términos para nombrar conceptos innovadores como “algoritmo”, “criptomonedas” o “inteligencia artificial”. 

Esto quiere decir, que cuando la sociedad percibe una necesidad inmediata de una nueva palabra, su uso se difunde con mucha más velocidad. La crisis climática es otra prueba de este fenómeno. Los fenómenos climáticos extremos y los desastres ambientales que aparecen y se multiplican día a día en cada rincón del planeta, requieren la creación de nuevos términos para describirlos. 

Desde el calentamiento global y la acidificación de los océanos, hasta el greenwashing de las empresas que fingen preocuparse por el medioambiente, exigen nuevas descripciones precisas y accesibles. La crisis climática no solo demanda un cambio en la forma de vida de los seres humanos, sino también en su vocabulario y forma de pensar. 

La importancia de la inclusión de estos nuevos términos a la RAE

La inclusión de estas 65 nuevas palabras relacionadas con la crisis climática al diccionario de la RAE es una respuesta a la necesidad imperante de comunicar y entender la magnitud de los problemas ambientales que atraviesa el mundo. 

Desde conceptos científicos complejos como «acidificación», hasta términos más accesibles como «sostenibilidad» y «huella de carbono», cada una de estas palabras será una herramienta que permita a la población hispanoparlante involucrarse en la concientización y la acción para cuidar el medioambiente. 

Los términos prestados del inglés

El hecho de que muchos de los nuevos términos sean préstamos de otras lenguas, especialmente del inglés, sirve para ejemplificar cómo la crisis climática es una preocupación global. Esta combinación de lenguas no solo permite enriquecer al idioma español, sino que ayudará a fortalecer la lucha mundial contra el cambio climático. 

Términos extranjeros como «cruelty free”, usado para diferenciar a aquellos productos elaborados sin lastimar a otras especies, o “zero waste” para expresar la minimización de residuos mediante la economía circular, permiten que haya una comprensión común y compartida entre personas de todo el planeta sobre la crisis climática, sus causas, consecuencias y posibles soluciones. 

Nuevas estrategias contra el cambio climático en base al lenguaje

En las mesas de debate del XVI Seminario Internacional de Lengua y Periodismo, los participantes reflexionaron acerca de la evolución del lenguaje, pero además, compartieron cuáles podrían ser las nuevas estrategias para mejorar la divulgación de los términos asociados con la crisis climática. 

El mayor desafío tal vez esté relacionado con la necesidad de que la ciudadanía de cada país hispanoparlante se involucre de mayor manera en la lucha contra el cambio climático. Pero también, los expertos resaltaron la importancia de combatir el negacionismo que se ha estado esparciendo en España y algunos países del continente americano. 

En este punto, puede ayudar que organizaciones ambientalistas de presencia global, como Greenpeace, WWF o The Nature Conservancy, incorporen estos términos en sus comunicaciones diarias. De este modo, será más fácil que la población deje de ver a la crisis climática como un problema abstracto y estas palabras comiencen a formar parte del vocabulario diario de las personas.