
El lanzamiento en Flow volvió a plantear una cuestión apremiante: ¿de qué manera detener la rápida extinción de las especies nativas? Científicos y ambientalistas coinciden en que el país enfrenta un proceso de pérdida de fauna sin precedentes.
Un viaje televisivo que conecta con una crisis real
En Animales en peligro, serie documental de Greenpeace, Cimarrón y Glowstar Media que tiene a Natalia Oreiro como presentadora, se pueden apreciar paisajes grandiosos, animales emblemáticos y jóvenes comprometidos con la conservación de la naturaleza. No obstante, más allá de la trama cinematográfica, el problema es claro: en los ecosistemas argentinos, la extinción se está propagando en silencio.
El Informe de Biodiversidad, publicado por el Ministerio de Ambiente de la Nación en 2024, señala que hay más de quinientas especies animales y vegetales amenazadas. Todas ellas están presentes o están conectadas con los contextos que se presentan en la serie, como el yaguareté, el aguará guazú, la rana andina de Baritú, el pingüino de penacho amarillo y el huemul patagónico.
Sandra Díaz, coautora del informe mundial de la Plataforma
Intergubernamental sobre Biodiversidad y Servicios Ecosistémicos (IPBES) y ecóloga argentina, advirtió en una charla con The Guardian: «Estamos perdiendo especies más rápido de lo que somos capaces de recuperarlas». «La biodiversidad no es un lujo, es la red que sostiene nuestra existencia.»
De la ficción medioambiental a los hechos científicos
El Proyecto Yaguareté (CONICET-FVSA) indica que, mientras el equipo de Greenpeace busca un yaguareté en los Esteros del Iberá o la Selva Misionera, este gran felino está sobreviviendo con menos de 250 ejemplares en todo el país. Los fuegos y la fragmentación de hábitat del norte están reduciendo su espacio vital a islas montañosas.
«Recuperar la integridad ecológica que permite su existencia es el verdadero reto, no solamente proteger a los animales carismáticos», comentó Adrián Monjeau, del Centro Nacional Patagónico (CENPAT-CONICET), en una conversación con Página 12. “Un aguará sin pastizal, un yaguareté sin selva, son sólo metáforas de lo que hemos perdido.”
La serie de Oreiro, accesible en Flow desde noviembre, consigue transformar esas metáforas en imágenes específicas: el rastro del animal que desaparece, el nido deshabitado y el silencio que antes estaba lleno de trinos.
Una perspectiva que va más allá de la pantalla
“Animales en Peligro tiene como objetivo «inspirar una conversación acerca de la responsabilidad colectiva ante la crisis medioambiental», según Mariana Rodríguez Pardo, directora de Greenpeace Andino. La producción no solo da cuenta de las especies, sino también de las historias de las comunidades y los científicos que están a cargo de su protección. «El mensaje es evidente: aún estamos a tiempo de revertir la pérdida, pero necesitamos tomar acción ahora mismo», afirmó a Reporte Ambiental.
Los expertos están de acuerdo en que la deforestación y el cambio climático tienen una estrecha relación con la pérdida de fauna. Ricardo Grau, ecólogo y académico de la Academia Nacional de Ciencias, destacó en Perfil que «Argentina es parte de un proceso global de degradación; sin embargo, tiene una oportunidad única: su amplia gama de ecosistemas todavía».
De la producción de documentales al compromiso social
La serie estará vinculada a la campaña #GuardianesDelPlaneta, que Greenpeace comenzará en escuelas y en plataformas digitales con el objetivo de fomentar la protección de los animales silvestres. : «Conocer es el primer paso para cuidar», dijo Oreiro.
De esta manera, la serie se transforma en un vínculo entre la divulgación y la acción, así como entre el rigor científico y el sentimiento de aventura. Ya que, como lo expuso Sandra Díaz en Nature, «defender la biodiversidad no es rescatar a otros seres vivos: es salvar las circunstancias que hacen posible nuestra vida».
