
Los glaciares africanos, centinelas del tiempo y guardianes de la memoria climática del continente, se encuentran en una lucha por su supervivencia. Un nuevo estudio, publicado en la revista Environmental Research: Climate, revela un panorama alarmante: la superficie de hielo en África se ha reducido a menos de la mitad desde principios del siglo XXI.
Glaciares en peligro: el Kilimanjaro, el Monte Kenia y las Montañas Ruwenzori
Las tres regiones glaciares más importantes de África, el Kilimanjaro, el Monte Kenia y las Montañas Ruwenzori, son el foco de este estudio. Estas cumbres, ubicadas en los trópicos, no lejos del ecuador, albergan un ecosistema único y frágil que se ve amenazado por el cambio climático, algo que ya denunciaron las organizaciones ambientalistas del mundo, como Greenpeace.
Más allá de las temperaturas, el impacto de las precipitaciones
El estudio destaca que la disminución del hielo no solo se debe al aumento de las temperaturas, sino también a la disminución de las precipitaciones. Las montañas africanas, que dependen de dos períodos lluviosos al año, están experimentando una reducción en la cantidad de nieve que cae en sus cumbres.

Datos que confirman una tendencia preocupante
Las cifras son contundentes:
- Monte Kenia: su superficie glaciar se ha reducido de 1,64 kilómetros cuadrados en 1899 a solo 0,07 kilómetros cuadrados en 2021/2022, una pérdida del 95,7%.
- Montañas Ruwenzori: el hielo ha pasado de 6,51 kilómetros cuadrados en 1906 a 0,38 kilómetros cuadrados en la actualidad, una disminución del 94,2%.
- Kilimanjaro: la mayor superficie de hielo de África ha disminuido de 11,4 kilómetros cuadrados en 1900 a 0,98 kilómetros cuadrados entre 2021 y 2022, una pérdida del 91,4%.
Un símbolo del cambio climático
Los glaciares africanos no solo son un tesoro natural invaluable, sino también un claro indicador del impacto del cambio climático. La velocidad a la que se están derritiendo es una señal de alerta que nos recuerda la urgencia de actuar.
Consecuencias para el ecosistema y las comunidades
La desaparición de los glaciares africanos no solo afecta al paisaje, sino que también tiene repercusiones en el ecosistema y las comunidades locales. El agua de deshielo, que alimenta ríos y arroyos, es vital para el riego, la agricultura y el suministro de agua potable.
- Escasez de agua: la reducción del agua de deshielo afectará la disponibilidad de agua para el consumo humano, la agricultura y la industria.
- Pérdida de biodiversidad: el ecosistema único que se ha desarrollado alrededor de los glaciares se verá amenazado, con la posible extinción de especies endémicas.
- Impacto en el turismo: la disminución del atractivo turístico de las montañas glaciares afectará las economías locales.
- Migraciones y conflictos: la escasez de recursos podría generar migraciones y conflictos por el acceso al agua y la tierra.

La necesidad de proteger un legado natural
Es crucial tomar medidas urgentes para proteger los glaciares africanos y mitigar el cambio climático. Reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, promover la sostenibilidad y fomentar la investigación científica son pasos necesarios para salvaguardar este patrimonio natural invaluable.
- Acuerdos internacionales: fortalecer los acuerdos internacionales para la reducción de emisiones, como el Acuerdo de París.
- Transición energética: invertir en fuentes de energía renovable y abandonar los combustibles fósiles.
- Reforestación: proteger los bosques y promover la reforestación para absorber el CO2 de la atmósfera.
- Educación y concienciación: educar a la población sobre el cambio climático y la importancia de proteger los glaciares.
Responsabilidad de las generaciones venideras
El futuro de los glaciares africanos está en nuestras manos. Es nuestro deber proteger este legado natural para las generaciones venideras y asegurar un planeta más sostenible para todos.